Naces y mueres.
Parece imposible
que aún ames.
Akiko Ijichi
Entre tu amor
y el mío, respiro
un inútil adiós
Me muero, amor,
con los ojos abiertos
te digo adiós.
Akiko Ijichi
¡Despierta, alondra!
Mirada atónita.
Me hundo en tí.
Refulge una
imagen inaudita.
Tú dentro de mí.
¡Basta ya!
Laderas oscuras
nos separan.
Me pierdo en tu
nieve azulada sin razón.
Imagen sin igual.
Akiko Ijichi
Mi sustancia grasa
espera tus manos.
Redondea mi pasión.
1 comentario:
el primero no deja en paz mi cabeza, por eso me encanta!!!
muy buenos!
Publicar un comentario