Takato Yamamoto
A cuatro vientos
se iba el otoño.
Nieve Azulada.
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En el nido azul
los pinzones dorados.
Otra ilusión.
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En la fría noche
cuerpos volteados.
Tibias palabras.
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Hizo refulgir
tras nuestros pasos,
piedras preciosas.
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Cien pájaros
en profundo abismo
se hundirían.
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Ella despertó
de aquel extraño trance.
Bruma violeta.
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Una masa nívea
se ve refulgir
sobre diminuto dorso.
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Jirones de niebla
en alturas arboladas.
Bello paisaje.
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Hierbas exuberantes,
lenta respiración.
Un camino cualquiera.
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Valle encantado
calculada dulzura.
Frutos rojizos.
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Se redondeaban
Fogosas
fantasías.
Un
infinito amor.
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Le pareció ver
el vuelo de mil aves.
Un deseo fugaz.
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Takato Yamamoto
3 comentarios:
Blanqui, Blanqui... me gustan tus haikus!! muy bellos, muy mágicos...
beso grande, Eva
expresan lo esencial muy naturalmente,
Miriam
siempre con la frescura que te caracteriza!!son bellisimos
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